07 diciembre 2007

PERSONAJES

Hoy voy a tocar a uno de los personajes más famosos y ocultos, de nuestra zona, la señorita conocida como la BB. Dada mi relación por línea materna con el pueblo de Peralejos de Abajo, donde sí se habla todavía mucho de esta mujer, busqué información acerca de este personaje. Y como dicen que el que encuentra halla voy a exponer aquí un poquito.
Antes de comenzar la historia de Ines Luna, diré que esta dama de la alta Aristocracia, fue propietaria de muchas fincas de nuestra zona: el Cuartón ( en Peralejos de Abajo y Traguntía), el Huelmo en Cipérez...., fueron algunas de las fincas que tenía por aquí.
Según me contó mi abuela allá por comienzos de siglo XX, apareció con un carro que no iba tirado por ningún animal, es decir, el primer coche que piso nuestras tierras fue el de esta señorita, que según me contó mi abuela iba tirado por carbón, o eso decían ellos.



Buscando, buscando...... apareció este coche que por lo visto perteneció a un amigo de la BB, y pasó grandes temporadas en la finca del cuarton. Este coche es un modelo de carreras de la época, ¿sería este el que vió mi abuela?

Debemos imaginar la cara de los del pueblo cuando vieron el primer automovil de la historia.
Pero adentremonos en el personaje:


Dña. Inés Luna Terrero (2-Julio 1885 / 8-Febrero 1953), hija única, heredó de sus antecesores, con apellidos ilustres algunos de ellos, un grandioso patrimonio. Era conocida en la zona por el apodo de B.B. y contó con una apasionante y azarosa vida que llegó a convertirla en una leyenda viva, adorada por muchos y desprestigiada por otros tantos.
En algunos medios se la define como una interesante y original mujer del modernismo español, una elegante de la alta sociedad, de sangre noble y burguesa, inmersa en la primera etapa del siglo pasado.
Nació en Bagneres de Luchon (Francia) el 2 de Julio de 1885. Hija de D. Carlos Luna Beovide fue la persona que trajo la energía eléctrica a Salamanca y Dña Inés Terrero, tenía propiedades por toda la provincia de Salamanca, estableciendo su residencia en la Finca El Cuartón (Traguntía) donde pasó gran parte de su vida.
Alternaba la vida en la finca con frecuentes viajes a Madrid, Francia, Inglaterra o Italia. Su vida en el cuartón supuso un choque frontal con las costumbres de la época en la comarca de Vitigudino. La propia casa del cuartón era un vivo reflejo de su existencia burguesa y extravagante, rodeada de jardines con varios cuartos de baño, esculturas de mármol, piscina, alfombras de pieles exóticas, lámparas de venecia, capilla e incluso en la época luz eléctrica.En la memoria publicada por D. Salvador Llopis se dice que llegó a ser amante de Miguel Primo de Rivera, muy aficionada a las fiestas, a vestir con pantalón, fumar tabaco y otras hierbas, portar armas de fuego, hablaba siete idiomas, contaba con la compañía de una miss Inglesa y con una gran pasión por el ganado bravo, que le hizo formar varias ganaderías y acoger a algunos toreros famosos como los hermanos Bienvenida.
A su muerte, en Barcelona a consecuencia de un cáncer de mama entre otras graves dolencias, y como consecuencia de morir sin testamento y sin herederos directos, el Estado se hizo cargo de sus bienes y se creó con parte de ellos una Fundación Benéfica que se denominó Fundación Inés Luna Terrero.
La BB, paseando por París
De niña con mantón y pandereta
Famosa fue la institutriz, he aquí una foto con ella
Esta foto es también para la historia, fue famosa porque tenía un toro de lidia amansado, aquí la podemos ver dandole de comer, al famoso toro.
La hora del Té, junto a una amiga en algunos de los salones del Palacete
FOTOS DEL PALACETE DEL CUARTON, HOY EN RUINAS....
Famosa fue esta casa en su época. Imaginemos..... principios del siglo XX, nuestra tierra pobre como pocas...., aparece una dama que posee: cuartos de baño ( existían varios dentro del palacio), el jardín adornado al estilo de Versalles ( piscina, cisnes, y hermosas fuentes....) según datos de la época y de la gente, solterona millonaria y caprichosa, le gustaba bañarse en leche de burra. Lo acondicionó con todo esplendor. Tenía luz eléctrica, agua corriente, bellos jardines, una preciosa ermita, estanque con cisnes... Decoró su interior con las valiosas pinturas y esculturas que trajo de sus numerosos viajes por medio mundo. Esta singular dama, que según dicen estuvo a punto de casarse con el general Primo de Rivera ( amante si que fue de este hombre), vestía a la última moda, fumaba en público y conducía su propio automóvil. Existe una leyenda que asegura que últimamente, durante las noches, se oye por la casa pasear a un fantasma, se supone que el misterioso espectro que deambula por allí no es otro que la famosa aristócrata. El edificio está en ruinas, rodeado de un gran jardín con espesa maleza. En el interior observé algunas pinturas en la pared que denotaban la riqueza y el lujo con el que estuvo adornada aquella mansión; el temor, una vez más, era el peligro de que el edificio se desplomara, pero he de confesar que el aislamiento, la soledad y el silencio, junto a la leyenda que se cuenta del lugar, también influyeron en mi animo. En este lugar se rodó la película "OCTAVIA", quien la haya visto, le resultará familiar este lugar.

Fotografía antigua, donde el Palacio no está aún en tal mal estado

Estado del Palacete hoy día

Fotografía donde se aprecia la ermita

Grabado de la época, aunque parezca de otro lugar esto está a pocos kilometros de nuestro pueblo, entre las fincas de San Cristobal, Traguntía y Peralejos de Abajo.

Tuvo una gran relación con la Iglesia, aquí se la puede observar en el centro de la fotografía delante de su casa, junto a uns frailes. Era frecuente que acudieran a la finca para retiros espirituales. De hecho su cuerpo descansa en el colegio del Pilar de Vitigudino.

Vista de la finca

Según decían las gentes de la época, tuvo una niña a la que no reconoció. A su muerte, sin dejar herederos pasó todo a manos de la Fundación Ines Luna, que principalmente se ha dedicado a la administración de las fincas. La casa está completamente en ruinas, aunque merece la pena visitarla, y darnos cuenta de lo que tuvo que ser cuando se encontraba en todo su expendor.

Quien quiera saber algo más en la siguiente dirección encontrará una amplia memoria mandada elaborar por su padre a un perito agricola de la época, acerca de El Cuartón. No tiene desperdicio ninguno. En ella aparece la figura del montaraz, vestigios de un antiguo régimen que su padre intentaba eliminar. Intentó traer en ese tiempo los adelantos que él conoció en Francia: máquinas de segar, abonos...Pero la gente de entonces se resistía a los cambios. En fin quien quiera que la lea.

http://www.usal.es/~ehe/Papers/Traguntia.pdf

06 septiembre 2007

PREGON DE LAS FIESTAS 2007

Este año 2007, me ha tocado dar el pregón de las fiestas, y me ha parecido oportuno colocarlo en esta página, debido a que gran cantidad de gente me ha pedido una copia. Y como sé que ciertas de estas personas siguen habitualmente el blog, he decidido colocarlo aquí.
Buenas noches a todos los presentes, y bienvenidos a este acto, mediante el cual, daremos comienzo un año más a estas esperadas fiestas.
Las fiestas de Cipérez son desde que tengo uso de razón, unas fechas marcadas por los reencuentros. Creo que todos durante el resto del año, estamos deseando que lleguen estos días, para ver a ciertos familiares, amigos o conocidos, que bien por la distancia, o por otros motivos, nos es imposible verlos fuera de estas fechas.
Recuerdo hace años, la inquietud con la que esperaba el comienzo de la verbena, para ver con que chica bailaría un paso doble o una rumba. O aquellos años de adolescencia, donde un simple vaso de sangría ofrecido en alguna de las peñas, bastaba para levantarte la moral para el resto de la noche.
Hablar, hoy día de nuestro pueblo dentro y fuera de la provincia, sin quererlo, es hablar del producto típico y de todos conocidos: las obleas. Allá donde estés, aparece este producto tan nuestro, y mediante el cual creo que todos nos sentimos identificados.
Pero los que vivimos, o hemos vivido, durante parte de nuestra vida en este lugar, guardamos ciertos recuerdos en nuestra memoria, que siempre llevaremos con nosotros.
A día de hoy cuando los pueblos van poco a poco desapareciendo, y nosotros, marchándonos a vivir a las ciudades, es cuando más, hechas de menos el pueblo y cuando más se apoderan de ti, los momentos vividos.
A diario veo a los niños jugando en los parques, hablando con el móvil, usando Internet, etc. Es entonces, cuando miro hacia atrás y comparo mi infancia con la suya. El haber nacido y crecido, en un pueblo como Cipérez me ha permitido tener una niñez, que no dista mucho de la que tuvieron mis padres o mis abuelos, disfrutar con la peonza en la plaza del pueblo, recorrer con bicicleta las calles aun sin asfaltar, donde las rodillas y los codos no paraban de sangrar. ¡ Pero, qué bien nos lo pasábamos!.
Recuerdo con recelo cuando con seis o siete años comencé a ir a la escuela, aquella en la que todavía se cumplía el viejo dicho “ LA LETRA CON SANGRE ENTRA”.
Muchos de vosotros recordaréis aquellos años, en los que ir a la escuela, era ir a que el maestro te pusiera la cara un poquito caliente, por tener mala letra o por motivos, que hoy día parecen insignificantes.
A la memoria me viene un día que estábamos haciendo cola para entrar a la escuela con D. Miguel, recuerdo que nos poníamos todos en fila para entrar, a las 3 de la tarde. El caso es que subía mi abuelo materno, por la carretera, hacia el bar de Flores a echar la partida, que por aquellas fechas, habría venido de Peralejos para pasar una temporada. Y estando D. Miguel abriendo la escuela, le dice mi abuelo, si el muchacho se porta mal, dele un poco de leña. Pues, yo creo que ya recibo bastante, pensé en ese momento, para mí.
Eran años, en los que por muy bruto que fueras, o aprendías o te hacían aprender la lección. No había nada más eficaz, que la vara o la mano del maestro.
De estos años de infancia recuerdo, lo bien que sabían los mocos en los recreos y lo calentitos que estaban en el invierno.
También recuerdo con cariño, los años en los que fui monaguillo, los primeros duros que me daba D. Juan Jesús, que nos servían para jugar al futbolín durante un rato, los días en los que por alguna causa, se rompía alguna cuerda de las campanas, y había que subir al campanario, por las viejas escaleras de caracol de la torre a tocarlas.
Creo que todos los que nos hemos criado aquí, en mayor o menor medida, tenemos mas o menos anécdotas vividas en s, comienzan a repoblar y establecer poblaciones permanentes para el laboreo y pastoreo de estas tierras. Las labores del campo, que durante la edad Media, realizaban los primeros pobladores, no serían muy diferentes de las que muchos habéis conocido hasta hace poco tiempo, y es que el mundo del campo ha variado muy poco durante siglos. No ha sido hasta hace unos veinte años, cuando por aquí se han dejado de ver las máquinas de segar y las trilladoras, las cuales supusieron un gran adelanto en esta zona allá por los años cincuenta. Pero hasta entonces, y durante siglos todas las labores del campo se han realizado manualmente como a muchos todavía os ha tocado.
El hambre y el frío hacían mella en la población de Cipérez durante los primeros años, eran típicas las muertes por neumonías, bronquitis y otras enfermedades propias de este clima tan extremo.
Los nabos fueron en esta zona durante largos inviernos, el sustento de familias enteras para calmar el hambre, hasta la llegada de la patata allá en el siglo XVI.
Siglos más tarde, a medida que el hambre, durante épocas de abundancia fue desapareciendo, las familias comenzaron a crecer, y vino un nuevo problema, el campo se quedaba pequeño para tanta gente, del lugar donde nos encontramos esta noche, han salido familias enteras hacia otros lugares para buscar trabajo y poder comer.
Cipérez durante años fue conocido por la abundancia de jornaleros, ha sido durante mucho tiempo, lugar de salida de mano de obra abundante hacia otros lugares de la provincia: segadores, esquiliches..., buena fe de ello da el refrán que las mozas de algunos pueblos recitaban y que decía lo siguiente: “Si te quieres casar, a Cipérez o al Villar, pero para más seguro en Sando o en El Cubo, y si ya es muy tarde seguro en Buenamadre”.
El caso es que nuestro pueblo hace tiempo, estaba lleno de vida por todos los rincones, tiempos en los que asistían a las viejas escuelas, situadas aquí junto a la plaza unos 300 ó 400 niños, cuando aquí vivían unas 1500 personas hacinadas en viejas casas, sin luz, ni agua. Aún recuerdo con nostalgia, noches de verano junto a mi casa, donde nos reuníamos unos 20 chavales, solo del barrio del puente para jugar al bote.
Veranos, en los que venían los hijos de los que un día habían salido de aquí, y durante dos meses, disfrutábamos haciendo presas, en las calles aún sin asfaltar o yendo a algunas de las charcas del pueblo a darnos un baño, a falta de piscina.
Pero en mi caso y a medida que crecía no era todo bueno durante el verano, fuimos los últimos de aquí en abandonar ciertas costumbres del campo, hasta hace 15 años me toco trabajar en ciertos oficios que poco a poco han caído en deshuso, labores del campo, como hacinar, ir a acarrear, y después venía la trilla con una vieja máquina, aquí al lado de las peñas del valle barrueco, para posteriormente recoger la paja y dejarla bien encalcada en el remolque.
Mucha gente yo incluido dirá que no vuelvan esos tiempos, pero como suelo oír a la gente mayor, son trabajos que por más que te cuenten si no los has vivido no sabrás, nunca lo que fue. Y es ahora cuando los recuerdas y dices como ha cambiado la vida en poco tiempo.
Y es que, parece que el tiempo no pasa, viviendo en una ciudad parece que todo es siempre igual, pero es cuando vuelves la vista al pueblo, cuando ves el transcurso del tiempo, costumbres que se van perdiendo y gente que se acaba marchando .
Por ese motivo me gustaría invitar a toda la gente, a disfrutar durante estos días de estas fiestas, a todos aquellos que un día salieron de aquí, a que cada año y en la medida que puedan vuelvan a sus orígenes, y que inviten a sus hijos a volver a sus raíces, por que aunque, no vivamos durante todo el año aquí, no olvidemos nunca cuales son nuestras raíces, y nos sintamos siempre orgullosos de ser de esta pueblo.
Me gusta ver en estas fechas, como gente que sin tener familia, bien por que ha desaparecido, bien por que un día vinieron con unos amigos y les gustó, cada año vuelven a Cipérez por las fiestas.
He visto algunos años como chavales de unos 15 años el último día, lloraban porque ya todo se acababa, y no volverían a verse hasta el próximo año.
Me gustaría desde aquí también hacer una mención especial a todas las peñas, bien sean veteranas o novatas, como miembro de una de ellas creo que estamos obligados a que la gente se sienta animada y a ponernos en manos del Ayuntamiento para todo aquello que necesite.
Por último, dar las gracias al Alcalde y a otras personas, que me animaron a decir estas palabras. Animaros a todos, a disfrutar durante estos días de estas fiestas, y olvidaros en la medida de lo posible de los quehaceres diarios.
Un saludo, y felices fiestas.

22 mayo 2007

LA MOTILA

Es época de motila, o esquila de las ovejas. Todos los años por estas fechas se despoja al animal de la lana, que durante el invierno le ha servido de abrigo.
Atrás han quedado los días en que se juntaban cuadrillas de esquiladores e iban de un rebaño a otro haciendo el trabajo. Eran tiempos donde las familias poseedoras de rebaños acogían a los esquiladores y compartían con ellos la comida.
La jornada transcurría de la siguiente manera: a primera hora de la mañana, se apartaban las ovejas que durante ese día se podían esquilar.


Esto se hacía en función de los " esquiliches " que hubiera, yo recuerdo de juntarse 6 o 7, personas esquilando a la vez.

Las herramientas utilizadas no han variado mucho en años si bien hoy día se utilizan ya máquinas eléctricas, que ahorran mucho tiempo. Pero desde muy antiguo se han utilizado tijeras, antaño eran tijeras normales, y posteriormente se pasó a otro tipo de tijera que tienen un sistema de tal manera que se abre sola y facilita mucho el trabajo.

Antes de comenzar el trabajo la tijera ha de estar bien afilada para ello se han utilizado siempre piedras halladas por estos lugares y que posees unas características propias para ello.

Y comienza el trabajo, una persona se encargaba de coger las ovejas una a una, e ir atándoles las patas mediante una cuerda o " lía", esta cuerda debía permanecer introducida en agua si no se utilizaba porque la grasa de la oveja la endurece y no permite que se doble bien.
La persona que se encargaba de coger las ovejas debía tener atadas el número suficiente para que los esquiliches no pararan.



Y mientras los gatos continúan con su somnolencia comienza la esquila :





Durante el proceso se podía dar el caso que el animal sufriera algún corte, para ello se acudía antiguamente a la fragua a por polvo de aluminio que es muy cicatrizante. Hoy día se la aplican ya productos médicos.

Y como resultado de todo esto, las ovejas ya esquiladas, y la lana. Antiguamente este producto, era un ingreso más y bastante importante para el ganadero. Pero hoy día apenas tiene valor en el mercado.

Antes eran numerosos usos los de la lana, relleno para colchones, tejidos....La mujeres de antaño mediante la rueca y el uso la iban transformando en hilo con mucha paciencia, que luego utilizaban para elaborar tejidos.



Desde primera hora de la mañana a los esquiliches se les " combidaba " con dulces y bebida. Y a la hora de comer las mujeres llevaban la comida ya preparada para todos.

El encargado de coger las ovejas también se encargaba de ir guardando la lana en sacas, que antiguamente eran de lana y hoy día son de tejido plástico.

He querido poner este documento gráfico, porque esta costumbre ya no se en el pueblo, las ovejas están dando paso al ganado vacuno que exige menos trabajo. Y dado que mi familia es la única que lo hace al viejo uso, ponerlo aquí como recuerdo.

26 abril 2007

NACIMIENTO DEL NUCLEO URBANO

No sabemos exactamente donde pudo comenzar el núcleo urbano del pueblo, en varias ocasiones he intentado, averiguar un poco sobre la parte más antigua del pueblo, pero no acabo de tener ideas concretas. Existen preguntas a las cuales intento encontrar respuesta.
Veámos en primer lugar, antiguamente los cementerios se construían al lado de las iglesias, ¿ Existió alguna vez un cementerio al lado de la iglesia?. Según Madoz, ya existía el cementerio actual allá por 1840.
¿Anterior a la iglesia actual existió otra construcción?. Seguramente sí. ¿ En el mismo lugar?.
En mi opinión la parte más antigua del pueblo, y donde se instalaron los primeros pobladores es quizás la parte sur del pueblo, es decir, de la carretera de Vitigudino hacia la derecha. Y posteriormente se fue extendiendo a medida que la población avanzaba.
Los primeros pobladores ya sabemos que provenían de la Rioja, concretamente de la zona de Nájera. Fueron terrenos que fueron entregados por los reyes sobre el año 1000, a gente noble y de la Iglesia.
Nuestras tierras estaban casi deshabitadas hasta entonces, existíeron algunas poblaciones en lugares como Sahelices, donde se conserva un dolmen. Zafrón...La zona de las arribes también estuvo muy concurrida, desde la prehistoria, hasta la época romana. En la prehistoria los Celtas y otros pueblos recorrieron las Arribes, de ellos nos han quedado diversos Castros. Los romanos introdujeron la vid, el olivo, .... Y posteriormente los árabes: naranjos...
Pero todo esto en las Arribes, ya que tienen un clima más templado que el nuestro, y mayor posibilidad de defensa en caso de ataque. Nuestro pueblo era zona que entonces se llamaba tierra de nadie, eran inmensas extensiones de tierra vacías llenas de arbolado ( encina, roble, zarzas...), que tenían un clima muy severo.
Durante la reconquista y a medida que avanzaban los cristianos hacia el sur, los terrenos que se iban ganando se iban repoblando. Así se asentaron allá por el año 1085, las primeras personas en Cipérez.
No tenemos tampoco noticias de la contrucción de los primeros asentamientos, pero la construcción de las casas en estos lugares se realizaba antiguamente a base de piedra de granito, muy abundante en este lugar, adobe y barro.
La construccíon de las casas se realizaba mediante el sistema de pared doble: se trata de ir haciendo dos paredes, una por dentro y otra por fuera y de vez en cuando uniendolas con piedras que abarcaran ambos lados, en medio se rellenaba mediante piedras pequeñas. Para la mejor unión de la piedra se utilizaba barro, si bien es cierto, que una pared bien hecha apenas lo necesitaba. Las habitaciones interiores se separaban mediante adobes (barro y paja secado al sol con forma de ladrillo), la techumbre se hacía mediante vigas de madera, después se cubría todo con ramos y encima se colocaba barro y teja. Las paredes debían ser gruesas, por dos motivos, para aislar la casa lo máximo posible del frío y el calor, y para soportar el peso de la cubierta que era bastante grande. Normalmente tenían unos 50 ó 60 cm de expesor, hay algunas que llegan al metro.
En las esquinas se colocaban piedras labradas lo más cuadradas posible para que encajaran. Las puertas y ventanas iban sujetadas si se podía mediante jambas enteras de piedra púlida:
Las puertas eran dobles, bastante resistentes y con un gran porton, que en verano se dejaba abierto para que corriera el aire. Las ventanas eran de madera y cristal, normalmente se introducía en las jambas unas rejas para evitar robos...

Prácticamente en todas las casas exitía lo que se llamaba " el doble" o "sobrao", construido mediante tablas de madera, que se utilizaba para guardar pricipalmente se tenía suficiente altura ( en algunas casas apenas llega al metro de altura), el grano ( centeno, avena, trigo...), es decir, como panera. También se utilizaban los útiles de labranza...

Los suelos en muchas ocasiones eran de lanchas de piedra púlida. Lo que no faltaba en ninguna casa era la chimenea, hoy ya casi desaparecidas las antiguas. Su principal característica era la gran campana que tenían, alguna he visto de 5 o 6 metros cuadrados, su principal utilidad era para la curación de la matanza durante el invierno a base del humo. Las casas eran de poca altura, los albañiles no tenían los andamios que existen hoy día, si alguna casa sobresale en Cipérez es porque pertenció a alguna familia adinerada.

Todo esto ha hecho que en su interior la temperatura apenas variara durante invierno y verano.

Antiguamente, con el fin de lograr una mayor protección de los bienes y animales, los pobladores construían las casas en el interior de los corrales, es decir, para acceder a la vivienda había que pasar por el corral. Esto fue desapareciendo, porque ocasionaba muchos problemas de salud.

Las fotos mostradas a continuación pertenecen a diferentes construcciones antiguas. Hoy día algunas ya ni existen. Algunas de ellas tienen el año de construcción.

En el interior de esta antigua casa todavía existe el antiguo horno, donde antiguamente se amasaba el pan. Este producto normalmente, cada familia se encargaba una vez por semana de fabricar el suyo. Normalmente se elaboraba para toda la semana. Era raro que el horno estuviera dentro de la casa, normalmente se encontraba en alguna cuadra al lado de la casa, o bien, si estaba el corral al lado, existía en él, "el cernidero". Este era el lugar de preparación del pan.

En concreto, en la casa de arriba se aprecia que el lugar donde está el horno, en su día no formaba parte de la casa, pero en un momento dado se amplio la estancia. Y es que esto, era muy común. Las casas en su mayoría eran muy pequeñas (sin baño claro está),y las familias grandes ( 5, 6, 7, 10 hijos ), más en ocasiones, abuelos....Se vivía como se podía. En una misma habitación podían dormir 3, 4, ó más personas. Los habitáculos si la casa era un poquito grande, tenían unas dimensiones mayores, pero no quiere decir, que en una casa hubiera más habitaciones, todo lo contrario, eran pocas, aunque de mayores proporciones. En estos casos, para crear un poco mas de intimidad se hacían las alcobas, que consistía en crear un habitáculo, normalmente de adobe dentro de otra habitación y en la entrada se ponía una cortina.

Las casas pasaban en ocasiones de padres a hijos, y si ya eran de por sí pequeñas, en ocasiones al pertenecer a dos familias se dividían en dos, lo que las hacía más pequeñas todavía. No es extraño ver en casas antiguas puertas tapadas con adobes o paredes que indican que un día eso estuvo abierto.

Hoy en día es increible ver antiguas casas, que parecen pequeñísimas, y que un día hubo una familia allí.

Año de construcción 1887


Por la parte de afuera, sobre todo en la fachada, se cubrían las piedras con barro y cal encima, con el fin de hacer más impenetrable el frío o el calor.

11 abril 2007

Fuentes

Existen en Cipérez numerosas fuentes algunas de ellas seguro que existen desde tiempos inmemoriales, como la fuente situada en la Tahona, que ha sido la que ha suministrado agua al pueblo desde siempre.
Se trata de una fuente que incluso en verano está manando agua, era el lugar donde antaño, antes que llegara el agua corriente al pueblo, acudían sobre todo las mujeres para llevar el agua hasta los hogares con cántaras, que llevaban sobre la cabeza.
Esta fuente, está cubierta por una bóveda de cañón hecha a base de piedra granítica. Ha sufrido numerosas remodelaciones en los últimos años, pero la estructura original no ha variado.
Hace algunos años a su izquierda existía un pilón,donde iba a parar el agua sobrante, que era utilizado por el ganado como abrevadero. Pero el ganado fue poco, a poco desapareciendo del pueblo, y el pilón dejo de tener utilidad y desapareció.
Hace unos dos años existía un gran sauce en su lado izquierdo que podía poner en peligro con sus raíces la estructura y fue talado. Aprovechando esta situación se procedió a la limpieza de la fuente y en su interior, ( que es roca granítica), apareció una silueta que semeja la figura de una mujer, dibujada en la roca. Esto ya es cuestión de cada uno el pensar una u otra cosa, yo creo que es una mancha en la roca, si bien es cierto que en una ocasión una chica de unos 14 años murió ahogada en la fuente, que era hija de una de las maestras del pueblo. Pero de esto ya hace bastantes años.

Imagen de la fuente cuando aún estaba el sauce

Otra fuente muy conocida en el pueblo es la antanica, está situada a la izquierda de la carretera del Cubo, más o menos a un kilómetro del pueblo. Antiguamente la estructura de esta fuente era la típica que abunda por estos lugares: se ponen unas losas de piedra a ambos lados y otra en la parte de arriba, tal y como están todavía muchas como la fuentita:



Fuentita

Siguiendo con la antanica, esta fuente hoy día se ha tapado para evitar que se enturbie el agua, y dispone de una bomba para facilitar su extracción. A su lado dispone de una antigua poza donde antiguamente iban las mujeres a lavar la ropa.

Vista del caño utilizado para la extracción del agua



Vista general del lugar donde se encuentra la fuente, resulta curioso porque se encuentra entre peñascos.

Poza de la antanica, lugar usado hasta no hace mucho tiempo para el lavado de la ropa.


Como ya hemos apuntado existen multitud de fuentes muy conocidas en este lugar, algunas ya casi desaparecidas como la fuente de la " Carcivilla ". Podríamos citar algunas más como la que se encuentra en el paraje conocido como " la Porqueriza", haciendo referencia quizás a que fue en su día un lugar dedicado a la crianza de cerdos. Esta fuente también tiene a su lado una poza como la antanica. En el lugar conocido como " el Bajundillo" también nos encontramos una fuente junto a su poza.

Otra fuente hace poco rehabilitada ha sido la "fuente del Hierro ", ( fotos):

" La Fuentita", fuente situada en calle oscura, dentro del pueblo. Esta calle tenía hasta no hace muchos años grandes olmos en uno de sus lados, y por la noche no había luz en toda la calle, de ahí su nombre, hoy día debido a la grafiosis, los árboles han desaparecido.

Fuentes como hemos apuntado hay por todo el término municipal, antiguamente pensemos que la gente pasaba gran parte de la jornada el el campo y era preciso disponer de agua en todo momento, si bien es cierto que muchas fuentes son muy pequeñas y en verano se secan, como la fuente de la "Rana", que cuando llueve mana (casi desaparecida). Allí donde se veía que brotaba agua de la tierra se excavaba una fuente, la mayoría quizás fueron excabadas por pastores o vaqueros que cuidando el ganado descubrían algún manantial.

Otros nombres son: Fuente de Valdebarreros, Fuente del bogallo...

22 marzo 2007

LAS PEÑAS DEL VALLE BARRUECO

Míticas estas peñas, que todo el mundo ha oído hablar de ellas. Se trata de unas rocas graníticas que sobresalen en un pequeño alto a apenas 1 kilómetro del pueblo en dirección a Vitigudino en un camino de concentración parcelaria.
Ha sido siempre un lugar donde ir de merienda días señalados como el jueves merendero..., lugar de diversiones cuando eramos pequeños...
De estas peñas años o siglos atrás se ha extraído piedra para la construcción, bien de casas o de linde de tierras.
Desde aquí se puede observar una buena panorámica del pueblo, si miramos al este. Esto es debido como hemos señalado en una ocasión que Cipérez se encuentra en una ladera. Es decir, desde las peñas observamos como el terreno baja hasta el nivel del río, y comienza a subir de nuevo.
Si miramos hacia el sur observaremos el famoso valle barrueco, un gran valle que antaño sirvió de era, y lugar para sacar barro para fabricar cántaras, botijos..., por los alfareros. Muchos de nuestros padres recordaran todavía las grandes parvas de cereal que se iban acumulando durante el verano para luego ser trilladas.
También en este valle se encuentra ya abandonado el campo de fútbol donde hace años se disputaban algunos partidos.
Si miramos hacia el oeste veremos otro valle conocido como " El Hoyo" , posiblemente porque el terreno aquí vuelve a hundirse un poquito para luego ascender otra vez, lo que dio lugar a la formación del valle.
Y si miramos al norte veremos un terreno un poquito más escabroso.
Las peñas se encuentran rodeadas de prados y cortinas bastantes llanas destinadas a labor y pasto del ganado.
Vista del pueblo desde lo alto de las peñas del valle barrueco.

Vista del valle barrueco al fondo, desde lo alto de las peñas.


Fotos del lugar donde se realizaba la extracción de piedra hace años, todavía hoy se observan restos de roca, diseminados por el lugar que un día fueron arrancados de la roca madre. Es posible observar marcas todavía en la roca madre de los utensilios utilizados.

Vista del valle El Hoyo, se pueden observar los verdes prados utilizados para el pasto del ganado.





Vista del valle del Hoyo desde la otra ladera, las peñas están a medio camino de aquí y el pueblo.






Vistas del valle

La mayoría de los valles que existen en estos parajes se originaron algún día hace millones de años por la fuerza erosiva del agua, que poco a poco fue desgastando el terreno hasta ir haciéndolo llano. Son valles donde aún en invierno se forman pequeños arroyos de agua, que transcurren por terrenos sedimentarios. El terreno aquí suele ser bastante fértil, pero el gran problema es que en invierno, permanece bastante encharcado.